Traductor
Posted by : Candy Zapata
Mi mayor logro ha sido comer cuando sentía apetito, y posar
el tenedor cuando ya me encontraba saciada.
Mi mayor orgullo ha sido el servir de ayuda a quien se
encontraba enfermo.
Cualquiera puede hacerlo!!!!!!!!!.
Tú puedes hacerlo.
Las palabras rompen barreras y eliminan el miedo. Si le
preguntaran a una enferma de bulimia qué es lo que más odia de su enfermedad,
posiblemente respondería que su cuerpo, o su incapacidad para adelgazar. Si se
lo preguntaran cuando está recuperada, todo apunta a que diría que las mentiras
en las que se vio envuelta, y la sensación de suciedad y oscuridad.

Lo que nos aterroriza hoy es nuestra conquista de mañana. La
grasa y las básculas para llegar al conflicto real: la inseguridad, la falta de
autoestima, la necesidad de aprobación y el perfeccionismo, la incapacidad para
demostrar auténticas emociones.
Una mezcla muy peligrosa, que puede generar una bulimia,
cualquier otro TCA o algunos de los problemas de adicción más comunes. Si
quiere verse la enfermedad como síntoma personal, delata una tendencia a un
comportamiento que puede acarrear problemas en un futuro si no se corrige. Si
se amplía la visión a la familia, nos encontramos con que sirve como detector
de problemas internos, que manifiesta el más débil del grupo. Si aún queremos
incluir una interpretación social, podríamos hablar de una sociedad en la que
no hay cabida para emociones profundas o duraderas, basada en apariencias, y
con una
presión excesiva sobre la mujer y los adolescentes.
Es una enfermedad a la que nadie quiere mirar, que nadie
pretende ver. Por eso continúa siendo invisible, y por eso, como a los
vampiros, hay que sacarla del ataúd y mostrarla a la luz del día.