Es muy importante comenzar por introducirnos en una visión y
en un pensamiento de abundancia.
Por muchos factores como nuestra educación, visión,
sociedad, etc., inconscientemente elegimos vivir en un mundo de escasez. Pero
la abundancia y la escasez están en nuestra mente y todo lo que nosotros vemos
como una realidad es tan sólo nuestra percepción.
La realidad está basada en nuestras creencias y
pensamientos; es por ello que en donde pones tu atención pones tu intención.
Absolutamente todo en este mundo es energía y como todo es
energía, los seres humanos vibramos a un cierto nivel energético y es por ello
que atraemos todo lo que es igual o parecido a nuestro nivel energético.
Cada emoción se maneja a diferente escala de vibración
energética.
Por ejemplo: la felicidad, la gratitud, el amor, la ilusión,
las ganas de hacer algo y las ganas de compartir con la familia, son emociones
que tienen un nivel de vibración muy alto. Contrario a esto, la ira, la rabia y
la envidia, tienen un nivel de vibración muy bajo.
Nosotros atraemos aquello que vibra al mismo nivel que
nosotros. A esto se le llama Ley de Atracción.
Si quieres atraer amor, hay que buscar y dar amor, si
quieres más gratitud en tu vida, tienes que dar y buscar gratitud.
Tenemos que valernos de cualquier recurso que nos ayude a
subir nuestra vibración energética para poder transformarnos.
¿Y cómo logramos esto?
Entrando en un estado de consciencia.
Cada decisión que tomamos en el día a día es un momento
divino para poder reflexionar y decidir cómo queremos que continue nuestra
vida.
Cada momento es sagrado y nos da el poder de decidir mirar
nuestras situaciones diferente o continuar viviendo de la misma manera.
“El presente es lo único que importa”
Wayne Dyer define la intención como una actitud, una forma
de ver el mundo donde la palabra rendirse no existe. No es algo que uno hace,
es una fuerza mayor, una fuerza que está en el Universo.
La intención es mirar hacia lo que quieres, aferrarte con el
convencimiento de que lo puedes lograr, y no dejarlo ir.
#5 CLAVES PARA FIJAR TU INTENCIÓN EN LA ABUNDANCIA
clase2#1 Actúa como si ya lo tuvieras: Vive como si ya
tuvieras lo que tanto deseas.
Es común sentir que no somos capaces de tener aquello que
deseamos, tener pensamientos de inferioridad y de no merecimiento.
El presente es lo único que importa y el cambio se crea en
el presente. Para ver lo primero que tienes que hacer creer. Ahora, no algún
día, no mañana: ahora.
#2 Cuida tus palabras: Evita decir: “no tengo dinero”.
Nuestras palabras son poderosas y hablar en negativo crea un
nivel de vibración bajo.
Cambia tus “no puedo” y mejor di: Escojo no gastar el dinero
en este momento, quizás en el futuro decida comprar aquello.
No entregues el poder al dinero, el poder lo tienes tú y tú
eres la que decide.
#3 Ley de la atracción: Cambia tus emociones.
Para atraer las cosas positivas a tu vida, decide ver todo
con amor, compasión, gratitud.
Elige vivir en el presente y alinea tus decisiones en la
conciencia de lo divino y lo sagrado.
#4 Enfócate en aquello que deseas: Dirige tu atención a todo
aquello que desees, trabaja en tus creencias, en cambiar la realidad y en tu
presente.
Medita y reflexiona cada situación. Todo aquello que ves y
crees de tu realidad es aprendizaje del pasado.
Tienes la posibilidad de crear una nueva realidad en cada
segundo.
#5 Decreta: Con nuestras palabras decretamos nuestro
destino.
Es con tu mente que decidirás qué harás, cómo lo lograrás y
como actuarás en cada situación.
Piensa en cómo actuarías si fueras la mejor persona en el
mundo haciendo lo que haces, sueña siempre en tu máxima versión. Decreta que
eres esa persona.
Recuerda que la abundancia no sólo es económica.
La abundancia es tener todo aquello que tanto quieres… amor,
salud, felicidad, éxito, paz.
